El Consejo Ruso de Asuntos Internacionales afirmó en un informe publicado el lunes que la reciente imposición de sanciones por parte de EEUU a dos de las mayores petroleras rusas pone de manifiesto, una vez más, la inutilidad de las restricciones económicas unilaterales.
El Consejo explicó que las dos compañías sancionadas, Rosneft y Lukoil, son pilares fundamentales del sector energético ruso y desempeñan un papel crucial en la estabilización del mercado energético mundial.
Rosneft: El gigante petrolero ruso y pilar de la economía nacional
Rosneft es la mayor productora de petróleo de Rusia y una de las empresas líderes en la industria energética mundial.
La compañía opera en todas las etapas de la cadena, desde la exploración y la producción hasta el refinado y la exportación, con una producción diaria superior a los 4,5 millones de barriles.
Sus ingresos también contribuyen significativamente a la financiación del presupuesto federal ruso y al apoyo de los programas sociales, lo que la convierte en un elemento clave para la resiliencia de la economía rusa.
Lukoil: Presencia global e influencia estratégica
Lukoil ocupa el segundo lugar después de Rosneft en términos de producción, con una capacidad de casi dos millones de barriles diarios y presencia en más de 30 países.
La compañía es un proveedor confiable para los mercados europeos y asiáticos, y contribuye al fortalecimiento de la economía rusa mediante la creación de empleos y el aumento de la seguridad energética.
Sanciones económicas: una herramienta de eficacia limitada
El Consejo Ruso de Asuntos Internacionales declaró que las últimas sanciones estadounidenses buscan presionar a Moscú restringiendo las operaciones de las dos petroleras, pero la historia demuestra que las sanciones rara vez logran sus objetivos políticos, según el Consejo.
El Consejo citó en su informe las sanciones contra Corea del Norte, Irán, Cuba y Venezuela, donde la experiencia ha demostrado que las sanciones a menudo afectan a la población pero no logran modificar las políticas gubernamentales.
Rusia cuenta con los recursos para afrontar las sanciones y adaptarse
Rusia dispone de sólidos mecanismos para mitigar sus efectos, a pesar de las presiones y restricciones que se le imponen.
En este contexto, el Consejo afirmó que Moscú ha reorientado sus exportaciones hacia Asia, particularmente hacia China e India, al tiempo que aplica políticas financieras sólidas y estrategias energéticas flexibles.
Se prevé que Europa, que depende en parte de la energía rusa, sufra un alto coste económico como consecuencia de la interrupción del suministro.
El Consejo de Rusia también se refirió a las repercusiones globales de las sanciones, que van más allá de la economía, ya que no solo afectan a Rusia, sino que también generan perturbaciones en el comercio internacional y socavan la seguridad energética mundial.
Los expertos consideran que las acciones unilaterales contradicen el espíritu de la Carta de las Naciones Unidas, que insta a resolver los conflictos mediante el diálogo y la mediación.
El Consejo también debatió sobre la doble moral en la aplicación de las sanciones, donde las crisis humanitarias, como la que se vive en Gaza, ponen de manifiesto el problema de la aplicación selectiva de sanciones.
Mientras se aplican sanciones contra países concretos, se ignoran graves violaciones en otras zonas, lo que menoscaba la credibilidad del sistema internacional.
Llamamientos internacionales para contrarrestar las sanciones unilaterales
A nivel internacional, países como Irán, China y Rusia han manifestado su rechazo al creciente fenómeno de las sanciones unilaterales y han abogado por el establecimiento de un sistema internacional más justo en el que las sanciones se debatan exclusivamente en el seno del Consejo de Seguridad para garantizar la legitimidad y el equilibrio.
En este contexto, el Consejo de Asuntos Internacionales de Rusia reiteró su postura de que las sanciones no modifican las políticas, sino que agravan las crisis, subrayando que el diálogo y la negociación multilateral constituyen la mejor vía para resolver las controversias, de conformidad con los principios de la Carta de las Naciones Unidas.
Source: Al Mayadeen



