El ministro de Finanzas israelí, Bezalel Smotrich, desató numerosas críticas tras realizar comentarios racistas contra Arabia Saudí, al tiempo que discutía la vinculación de la normalización de relaciones con los países árabes al establecimiento de un Estado palestino. Mientras tanto, el presidente estadounidense, Donald Trump, advirtió que «Israel perderá el apoyo de EEUU» si continúa con su plan de anexar la Cisjordania ocupada, mientras que el vicepresidente estadounidense, J.D. Vance, calificó la votación de la Knesset sobre la ley de «soberanía» como un «insulto personal».
En su discurso, Smotrich afirmó: «La soberanía es la prueba. Si Arabia Saudí nos dice: normalización a cambio de un Estado palestino, la respuesta es no, gracias. Sigan montando camellos por el desierto en Arabia Saudí», una declaración que provocó una condena generalizada y fue calificada de racista.
El ministro de extrema derecha enfatizó que su postura de rechazo a cualquier vínculo entre la normalización y el establecimiento de un Estado palestino «expresa un compromiso de principios con la soberanía israelí sobre el territorio», según informes de medios israelíes.
Smotrich se disculpa con Arabia Saudí por sus “desafortunadas” declaraciones
Más tarde el jueves, el ministro de Finanzas israelí, Bezalel Smotrich, se disculpó por las “desafortunadas” declaraciones que había hecho previamente, criticando a Arabia Saudí.
Smotrich publicó en Twitter: “Mi declaración sobre Arabia Saudí fue desafortunada y lamento la ofensa que causó”.
Las declaraciones de Smotrich generaron críticas generalizadas en “Israel”. El líder de la oposición, Yair Lapid, escribió en Twitter: “A nuestros amigos de Arabia Saudí y Oriente Medio: Smotrich no representa al Estado de Israel”, exigiendo una disculpa.
La Knesset vota el proyecto de ley de anexión de Cisjordania
Sus declaraciones se produjeron después de que la Knesset israelí votara en lectura preliminar el miércoles un proyecto de ley que legaliza la anexión de la Cisjordania ocupada e impone la soberanía israelí sobre los asentamientos. Este proyecto de ley, a pesar de la oposición del primer ministro Benjamin Netanyahu y la presión del gobierno estadounidense, advirtió sobre las repercusiones de esta medida en las relaciones con Arabia Saudí y el camino hacia la normalización regional.
En contraste, el vicepresidente estadounidense J.D. Vance, quien se encuentra de visita en Tel Aviv, comentó sobre la votación de la Knesset, calificándola de “extraña” y de “un asunto político absurdo”. Añadió que le habían informado con antelación de que la votación era “meramente simbólica”, pero que se sintió “personalmente insultado”, subrayando que la administración estadounidense está “muy insatisfecha con esta línea de acción”.
El presidente estadounidense, Donald Trump, en una entrevista con la revista Time, afirmó que el Estado ocupante “no impondrá la soberanía en Cisjordania”, subrayando que esto “no sucederá porque di mi palabra a los países árabes”, advirtiendo que “cualquier medida de este tipo hará que Israel pierda todo el apoyo de Estados Unidos”.
CBS News informó que el príncipe heredero saudí, Mohammed bin Salman, visitará la Casa Blanca el 18 de noviembre, su primera visita a Washington desde el regreso de Trump al poder. La visita tiene como objetivo discutir un acuerdo de defensa mutua entre Riad y Washington, así como revisar los acuerdos de seguridad e inteligencia firmados durante la visita de Trump a Oriente Medio en mayo pasado.
Se espera que la reunión también aborde la adhesión de Arabia Saudí a los “Acuerdos de Abraham”, después de que Trump declarara a Fox News la semana pasada que “espera que los acuerdos se amplíen pronto y que Arabia Saudí y otros países se unan”.
Source: Arab 48 (editado y traducido por el sitio de Al Manar en español)



